Los líderes más desconocidos de Civilization VI: Gilgamesh, Bà Triệu y Basilio II

Civilization VI de Sid Meier es un juego peligrosamente adictivo en el que debes liderar el desarrollo de una de las 35 civilizaciones jugables en cuatro campos distintos: la ciencia, la cultura, la dominación y la religión. Precisamente por tener diferentes formas de ganar, no es un juego de estrategia al uso donde guerrear con todo bicho viviente. Lo realmente interesante del juego está en comprender los puntos fuertes de cada civilización para obtener la victoria global o para adelantarte en alguno de los campos específicos.

La información histórica que el juego provee a la hora de nombrar a ciertas unidades o distritos específicos es bastante enriquecedora. Aun así, muchos de los líderes nos resultan prácticamente desconocidos más allá del juego. Por eso, en estas entradas voy a hablar sobre aquellos personajes que el juego ha escogido para dirigir a las civilizaciones y que no nos suenan tanto como Cleopatra, Pericles o la reina Victoria.

Gilgamesh

Gilgamesh es el líder de Sumeria, la civilización más antigua que podemos elegir en la sexta entrega de Civilization. Esto, por otro lado, es evidente, puesto que Sumeria es igualmente una de las primeras civilizaciones que se conocen hasta la fecha. En la pantalla de carga de la partida, se presenta al líder mesopotámico de la siguiente manera:

Rey Gilgamesh, tienes un gran peso descansando sobre tus hombros. Tu propio pueblo, y muchos otros pueblos extranjeros, te ven como su líder. Pero tú no eres un hombre cualquiera, y las cargas del mundo nunca te harán vacilar. Anima al pueblo sumerio a colonizar las tierras fértiles a lo largo de los ríos, y elige a tus aliados con cautela, pues muchos querrán arrebatarte una parte de tu fuerza. Adelante, es hora de que comiences tu épico relato.

Fuera de las facultades de historia, Gilgamesh no es tan conocido popularmente como lo son otros personajes como Cleopatra, Roosevelt o Gandhi. Seguramente su relación geográfica con Oriente Próximo ha hecho que en occidente no se le haya rendido tanto culto como a los emperadores romanos o a los padres fundadores de los Estados Unidos. No obstante, su importancia y la magnitud de sus hazañas son equiparables o incluso superiores a las de cualquier líder histórico. Situado entre lo mítico y lo real, es un personaje que ha trascendido a la historia no tanto por ser uno de los reyes de la ciudad de Uruk, sino por protagonizar el primer poema épico de la historia.

El poema de Gilgamesh narra el viaje del rey de Uruk en su búsqueda de la inmortalidad. En esta odisea, se topa con todo tipo de seres mitológicos y experimenta una evolución que es incluso más beneficiosa que el propio objetivo con el que partió. Lo poco que sabemos de él es información sacada del estudio de esta obra: que reinó en torno al 2750 a.C. durante 126 años, que medía 5 metros y medio, y que no tenía un igual en el combate. Evidentemente, estas características más propias de dios que de hombre no son esenciales históricamente, pero sí lo es el hecho de que  hace ya casi 5.000 años las gentes de la Antigüedad compusieran gestas para sus gobernantes.

El descubrimiento de esta epopeya es relativamente reciente, si lo comparamos con otros textos de similar magnitud como la Ilíada o la Biblia. A principios de la década de 1850, el arqueólogo Austen Henry Layard encontró en la Biblioteca de Asurbanipal, en la ciudad de Nínive, unos 15.000 fragmentos de tablillas con escritura cuneiforme que posteriormente fueron estudiadas y traducidas. Este relato, conocido como la versión «estándar», se atribuye al escriba babilonio Sîn-lēqi-unninni (o Sin-legi-unnini), que posiblemente hiciera la labor de recopilación de la obra al completo entre el 1300 y el 1100 a.C.

Tablillas sumerias clasificadas

El poema de Gilgamesh supuso una revolución en la concepción que se tenía de la historia antigua y de las primeras civilizaciones. Las palabras que el poeta Reiner María Rilke pronunciara en 1916 resumen bastante bien el asombro de la crítica histórica a principios del siglo XX:

¡Gilgamesh es formidable! … Considero … que se encuentra entre las mejores experiencias que le pueden suceder a una persona … Me he sumergido en él y en esos fragmentos verdaderamente gigantescos he experimentado medidas y formas que pertenecen a las obras supremas que pertenecen a las obras supremas que jamás haya producido la mágica Palabra

Décadas después, la idea que se tiene del poema varía en función de la corriente historiográfica que lo estudie. Por eso, es un perfecto ejemplo para entender los diferentes puntos de vista desde los que se ha abordado el estudio de la historia desde el siglo XVIII.

Así, el positivismo lo consideraría como la primera epopeya de la tradición literaria universal, que hablase de una civilización tan avanzada desde la que podría partir la evolución de las sociedades. El materialismo histórico, por el contrario, creería que el personaje de Gilgamesh fue el primer intento de divinizar la figura del monarca, por lo que estaríamos ante una de las primeras herramientas para la consecución del estado. Por su parte, para la escuela de los Annales la validez del poema dependería del grado en que describiera la sociedad de su tiempo. En cuanto al historicismo, por último, sería difícil determinar la veracidad de los hechos y cabría preguntarse, por tanto, hasta qué punto se puede tomar esta obra como un documento para el estudio de la historia de Mesopotamia.

Bà Triệu (o Lady Triệu)

Bà Triệu, tu pueblo te recordará como una diosa. Levántate contra aquellos que intenten contener tu tormenta y alza la espada en gesto de desafío. Ninguna familia ni enemigo te contendrá.

Triệu Thị Trinh, como se la menciona comúnmente en los escritos tradicionales, fue una rebelde que lideró a los soldados vietnamitas contra los invasores chinos en torno al año 248 d.C. Aunque las versiones varían en pequeños detalles, en rasgos generales la historia de Lady Triệu es la siguiente:

En un poblado de la prefectura de Cửu Chân (una región que se encontraba a aproximadamente 300 kilómetros de la actual capital Hanói), vivía esta joven huérfana de 20 años a la que su cuñada tenía completamente atormentada desde que su hermano mayor había marchado a la guerra. Cansada de su crueldad, la leyenda cuenta que Triệu Thị Trinh terminó asesinándola y huyendo hacia la montaña, donde reunió a más de 1.000 hombres para ir a combatir a los invasores chinos. Cuando su hermano se enteró de sus planes, se presentó ante ella para persuadirle de que no se rebelara, a lo que ella le contestó estas famosas palabras con las que ha pasado a la historia del pueblo vietnamita:

Solo quiero montar el viento y caminar sobre las olas, matar las grandes ballenas del mar del Este, limpiar fronteras y salvar a la gente de ahogarse. ¿Por qué debería imitar a los demás, inclinar la cabeza, inclinarme y ser esclavo? ¿Por qué resignarme a las tareas domésticas serviles?

Trần Trọng Kim, Una breve historia de Vietnam 

Otras versiones lo traducen de la siguiente manera:

Me gustaría montar tormentas, matar tiburones en mar abierto, expulsar a los agresores, reconquistar el país, deshacer los lazos de la servidumbre y nunca doblar la espalda para ser la concubina de cualquier hombre

Nguyễn Khắc Viện,  Vietnam, a long history

Al igual que con Gilgamesh, y como con muchos otros personajes del pasado más antiguo, los relatos le otorgan un carácter sobrenatural tanto en su fuerza como en su personalidad. Se la describía como una mujer enorme (de casi 3 metros de altura), con pechos de más de un metro de longitud, capaz de montar un elefante para luchar y que siempre vestía túnicas de tonos amarillos y dorados. En estas descripciones, al igual que en las pocas ilustraciones tradicionales que se conservan actualmente, podemos observar la combinación de atributos generalmente femeninos -fundamentalmente, de fertilidad- y masculinos -de fuerza y destreza en la lucha.

La figura de Bà Triệu se convirtió, con el tiempo, en una seña de identidad para Vietnam. Sobre ella recayó el peso de la resistencia contra China y de la independencia de la nación contra los invasores extranjeros. Por eso, no es extraño encontrar en algunos puntos del país templos en su conmemoración o que incluso su figura se retomara en la Guerra de Vietnam como un símbolo de la resistencia. Hoy en día, no solo aparece en Civilization VI, sino que la serie Watchmen de HBO tomó su nombre para dar vida a uno de sus personajes, además de que muchos libros de perspectiva feminista la están tomando en cuenta como una de las personalidades fundamentales en la historia de las mujeres.

Templo a Bà Triệuen en la provincia de Thanh Hoa

Basilio II

Tus enemigos te temerán, rey Basilio II, ya que fuiste forjado en el fuego. Deja que tu astucia y ambiciones afilen tu espada. Protege tu orgullo y enfréntate a tus enemigos, tanto dentro como fuera de tus muros.

El asesino de búlgaros, como comúnmente se le conoce, fue rey de Bizancio entre los años 976 y 1025. Basilio II creció en una corte en la que el veneno y las habladurías eran el pan de cada día. Si bien es cierto que la historia bizantina está plagada de episodios de traición y corrupción, los tiempos convulsos en los que se encontraba el Imperio al nacer Basilio batieron todos los récords. Hasta el punto de hacer tambalear los cimientos de la dinastía macedónica que había permanecido en el poder desde el año 867.

Ante esto, el hijo mayor de Romano II tuvo siempre como referentes a los antiguos emperadores Justiniano y Constantino, de los que envidiaba la fuerza y la grandiosidad con las que pasaron a la historia. Lo cierto es que estos primeros años de crisis en su reinado y las luchas contra los conocidos como usurpadores transformaron al que había sido un heredero despreocupado en un gobernante con mano de hierro. Así lo describía el Códice griego de Marciana:

Confiado, pero insociable, lleno de frialdad, se halla el Emperador con sus armas sobre el enemigo y rodeado de ángeles e imágenes que flotan en el aire

En Bizancio, de Franz Georg Maier, pp. 207-208

El reinado de Basilio II estuvo marcado, en un primer lugar, por los enfrentamientos internos contra los usurpadores Bardas Esclero y Bardas Focas. Más tarde, cuando estas rebeliones fueron mitigadas gracias a la ayuda del príncipe Vladimiro de Rusia, pudo centrarse en la conquista de Bulgaria. De esta forma, durante décadas y décadas la península de los Balcanes presenció batallas interminables que finalmente dieron la victoria a Bizancio.

Esta miniatura pertenece a una edición del silo XIV de la Crónica de Juan Escilitzes sobre las campañas de Bizancio contra los búlgaros

A Basilio II se le considera uno de los emperadores bizantinos de mayor éxito no solo por conquistar Bulgaria. Las reformas que emprendió durante su reinado para afianzar la unidad en su imperio y prevenir futuras revueltas también resultaron decisivas en la herencia que dejó a los reyes posteriores. Un legado que, desgraciadamente, no se perpetuó siglos después.

Publicado por soyunzorrococlo

Soy graduado en Periodismo y Humanidades y actualmente me encuentro opositando para profesor de Historia y Geografía. He creado Babyloniak como un punto de encuentro entre una de mis grandes aficiones (los videojuegos y el anime) y mi futura profesión. Espero poder crear un lugar en el que nos deshagamos de los prejuicios sobre lo friki y lo otaku para conocer hasta qué punto las Humanidades están más presentes en nuestras vidas de lo que creemos.

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